Karma, y no me refiero a una amiga catalana. Me refiero a la energía que nos rodea, a la actitud que desprendemos y la que los que nos rodean reciben de nosotros. Últimamente creo que mi karma no está en mi línea. He conseguido enfadarme con amigos a través del Facebook por una sola frase, malinterpretar contestaciones, irritarme por miradas y por falta de llamadas o comentarios por otras cosas. Y estoy convencida de que no soy yo, es el karma. Porque no hay otra explicación (…).
Alguna energía o alguna revelión de los astros hace que, sin ganas de enfadarme y sin ningún motivo aparente de exasperación, acabe atacada. Karma, relájate por favor.
Alguna energía o alguna revelión de los astros hace que, sin ganas de enfadarme y sin ningún motivo aparente de exasperación, acabe atacada. Karma, relájate por favor.
Anónimo says
Va ha ser por la diferencia entre lo que crees que haces y lo que haces en realidad… Por ejemplo, así a vuela pluma, dar un golpe a una pelota; crees que le darás y la realidad puede ser otra, creo.
Anónimo says
Karma… que voy en tu barco y me puedo marear. Tienes mucha razón, no eres tú es el karma del despacho pero, a veces, tengo las mismas sensaciones que has descrito, ¿Ahora te vas a rajar? ¿Tú? ¡Ni de coña!. Acuérdate, hemos pasado por peores…
Mª José says
Mi Karma está guerrero… es el mejor pensamiento que leo en mucho tiempo… Mi karma está guerrero. El Dalai Lama nunca llegó a esta conclusión viendo como era, que parecía que fumase marihuana!! siempre feliz y contento, estable… Pues VIVA LA INESTABILIDAD Y EL GENIO FEMENINO! aunque es verdad que a veces le vemos 12 pies al gato…
y porque no puedo decir quien soy?? pues soy Mª José